Yo en este caso utilicé la receta de las galletas de mantequilla de Mariló en su blog Pan, dulces y otras palabras. Una vez que tenemos la masa, se divide en seis partes y teñimos con colorantes comestibles. Yo utilicé rojo, amarillo, verde, azul, naranja y violeta.
Dejamos las masas enfriar en el frigorífico y encendemos el horno a 200º. Una vez frías, una hora más o menos, procedemos a hacer churros con cada color. Luego vamos uniendo los churros y enroscándolos hasta formar la galleta. Es bastante trabajoso, porque se rompe mucho. Dejamos un pegotito encima de la galleta.
Metemos al horno unos 10 minutos aprox. Sacamos del horno y le incrustamos los adornos. Yo les puse las mariposas. Las pinté con Rainbow dust metálico blanco y espolvoreé con Hologram white, todo ello de la Casita dulce de las Flores y listo.
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